Resumen
Lee y escucha La Leyenda de la Nieve
Ciao a tutti, cari amichetti nostri. Finalmente è arrivato il freddo (non che ne sentissimo la mancanza) e, in tante parti d’Italia, anche la neve.
Pero, ¿alguna vez te has preguntado de dónde viene la nieve? Allí historia que les leeré esta noche les contará una versión hermosa y de cuento de hadas, que (quizás) no sea la verdadera explicación, pero es lindo creer que realmente podría ser así.
lee conmigo
Hace mucho tiempo, un pastorcito llevó a sus ovejas a pastar en el montaña. La hierba estaba fresca y el agua clara; las ovejas se llevaban tan bien que no querían volver nunca más y el pastorcillo decidió complacerlas, porque él también estaba feliz allá arriba.

Pero cuando terminó el verano, las ovejas no querían volver al establo del pueblo.
La hierba todavía estaba verde y la oveja le pidió al pastor que esperara un poco más.
El pastorcito, que era joven e inexperto, decidió complacerlos y esperó.
Cuando llegó el momento de regresar, la temporada de lluvias ya había comenzado y el camino estaba demasiado resbaladizo para volver a casa.

Las ovejas tuvieron miedo y le pidieron al pastor que esperara un poco más.
Cuando pasó la lluvia, la escarcha ya se había instalado y el camino estaba demasiado helado para volver a casa.
Las ovejas tuvieron miedo y le pidieron al pastor que esperara un poco más.
Pero la helada también había congelado los pastos y las ovejas ya no encontraban qué comer.
Un día, el mayor de ellos miró hacia el cielo y vio nubes.
“¿Por qué no buscamos en las nubes? Seguro que habrá algo de comer allí arriba.
El rebaño decidió intentarlo: subieron más y más alto, hasta que desaparecieron.
Más allá de las nubes, encontraron un reino encantado. El aire era cálido, y por encima de las nubes crecían hierbas aromáticas y pequeños árboles llenos de frutos; las ovejas se llevaban tan bien que no querían volver nunca más y el pastorcillo decidió complacerlas, porque él también estaba feliz allá arriba.
Sin embargo, en el reino más allá de las nubes vivían los duendes del cielo, pequeñas criaturas traviesas. Tan pronto como los animales se durmieron, tomaron sus tijeras -zac... zac...- cortaron los rizos de lana y los tiraron hacia abajo, sobre la tierra.
Pasando a través de las nubes, los erizos se empaparon de agua.
Pasando por el viento, se congelaron.
Cuando llegaron a la Tierra, se habían convertido en copos de nieve.
Desde ese día, cada vez que la lana vuelve a crecer en las ovejas, los duendes celestiales la cortan y la tiran: ¡y por eso cae la nieve!

Che ne dite? E’ talmente dolce e poetica questa spiegazione che sono certa questa notte dormiremo tutti come angioletti.
Buonanotte.
