Tiempo de lectura: 5 minutos
Lee y escucha El Caurabesul que lloraba en el bosque
Resumen
Ciao ragazzi, vi è mai capitato di vedere una persona e dire a primo impatto che è antipatica e poi diventate amici?
No digas mentiras porque a todos les ha pasado.
El protagonista de esta velada es un caurabesul como en otros cuentos populares de Valtellina. También llamado caurabésula o chotacabras, según unos este animal legendario es un ave, para otros una cabra embrujada: vaga por el bosque de noche, haciendo un ruido terrible, que asusta a pequeños y mayores.
Lee conmigo:
"¡No grites, despierta el caurabesul!",le dijo la abuela al niño antes de irse a dormir.
El caurabesul era un animal temible que ningún niño del pueblo había visto nunca. Todos decían, sin embargo, que tenía un aspecto terrible: podía transformarse en pájaro, a veces en búho, a veces en murciélago o, cuando quería acercarse a una granja, se convertía en cabra.
Mamma e papà non credevano a queste storie: tutti i nonni del villaggio, però, dicevano sempre ai nipotini:
"¡Si eres un mocoso, llamaré al caurabesul!"y los niños temblaron de miedo.
Una notte il bambino andò a letto con il cuore agitato. Tutti dormivano: mamma, papà, i nonni nella casa accanto, il cane.
El niño se despertó y miró a su alrededor: todo estaba oscuro. e la mamma non era ancora arrivata a dire “è mattina”. Un grito vino del bosque.Un grito extraño: el sonido de un animal, pero no el crujido de una rana o un pato.Sonaba como: un tenedor chirriando contra la pared de la casa, las cacerolas cayendo, la silla arrastrándose por el suelo.
“Il caurabesul!”, grida il bambino, “Mamma, il caurabesul!.
La mamma si svegliò e corse nella camera del bambino. "No hay nadie, niño". “La caurabesula no existe y el bosque calla”.
Il verso non si sentiva più. Mamma diede un bacio al bambino e tornò nella sua camera.
Después de un rato, el niño volvió a escuchar ese ruido extraño.
“Il caurabesul! Mamma, è tornato!”.
La mamma non sentiva …Era una notte d’estate e il papà aveva lasciato una finestra aperta.
El bosque volvió a quedar en silencio durante unos minutos. El niño contuvo la respiración y se escondió debajo de las sábanas, con los ojos abiertos.
Luego se escuchó un batir de alas y el grito: era similar al verso anterior, pero no tan fuerte.
El animal aprovechó la ventana entreabierta, entró a la casa y se acomodó en la cama del niño.
"Hola, niño", gritó.
El niño sacó un ojo de debajo de la manta para mirar.Temblaba de miedo: ¡el caurabesul había llegado de verdad!
Los abuelos tenían razón: era un pájaro, todo azul, no tan grande y un poco menos aterrador a la vista. Sólo sus versos daban miedo.
El niño estaba temblando; incluso el extraño pájaro tembló.
"Sai dov’è la mia mamma?”, le dijo el animal al niño.
"Lo perdí mientras volaba por el bosque, vi una ventana abierta y pensé que estaba aquí".
El chico quiso responder, pero la voz se le atascó en la garganta.¡Los abuelos decían que los Caurabesul secuestran niños!Este, sin embargo, era un cachorro y no parecía tan amenazador.
"Perché non rispondi, bambino? Hai preso tu la mia mamma?“,dijo el pajarito.
Mientras tanto, el bosque parecía estar completamente despierto porque había un gran ruido: crass de ranas, aullidos de lobos y otros chirridos de tenedores en la distancia.
La voz del chico regresó lentamente.
“Com’è fatta la tua mamma, uccello?”
El cachorro respondió:
"Ella está hecha como yo, pero más grande".
"Pájaro", continuó el niño.
“Tu sei cattivo? La tua mamma è cattiva?”.
“La mia mamma non è cattiva!” gridò l’uccellino e saltò su tutte le furie. “Io non sono cattivo”.
“Uccello strano”, disse ancora il bambino. “La tua mamma rapisce i bambini?”.
Esta vez sin embargo, elel cachorro del misterioso animal estaba aún más asustado que el niño.
“Tu sei cattivo!” gridava, “la tua mamma è cattiva”.
El viento golpeaba con fuerza contra la ventana. Hubo otro ruido extraño, muy, muy fuerte. Un pájaro más grande entró luchando por la ventana y aterrizó en la cama del niño.
Era mamma caurabesul ed era venuta e prendere il suo cucciolo.
“Cachorro”, gritó, hablándole al pajarito, “¿dónde estabas? ¡Os he dicho muchas veces que no debéis entrar en las casas!”.
El chico se quedó en silencio.
“Andiamo a casa, cucciolo”, disse mamma caurabesul al suo piccolo e poi, rivolta al bambino:
“Hola bebé, que tengas un lindo sueño y recuerda. No te preocupes cuando escuches mi extraño grito en la noche. Tengo que gritar, porque así mi cachorro me escucha y no se pierde en el bosque”.
Mamma caurabesul e il suo figlioletto volarono via dalla finestra. Il bambino gridò: “Mamma!”. La mamma si alzò dal letto e raggiunse la camera del bambino. “Che c’è ancora?”, disse sbadigliando.
“Mamma, ho scoperto che i caurabesul sono animali buoni”.
“Ah”, disse la mamma, facendo di sì con la testa. “Torna a dormire, ora”.