Lee y escucha el cuento: "El buen Gilberto"
Ciao amiche ed amici carissimi dalla vostra Francesca Ruberto ♥
Hoy les leo "Buen Gilberto" tomado del libro "Favole al telefone" de Gianni Rodari

Giovanni Francesco Rodari, conocido como Gianni (pronunciado /roˈdari/; Omegna, 23 de octubre de 1920 - Roma, 14 de abril de 1980), fue unoEscritor, educador, periodista y poeta italiano, especializado enliteratura infantil y traducida a muchos idiomas. El único escritor italiano que ha ganado el prestigioso

El buen Gilberto tenía muchas ganas de aprender y por eso siempre prestaba atención a lo que decían los grandes.
Una volta senti dire da una donna: – Guardate la Filomena come vuoI bene alla sua mamma: le porterebbe l’acqua nelle orecchie.
El bueno de Gilberto reflexionó: - Magníficas palabras, tengo muchas ganas de memorizarlas.
Qualche tempo dopo la sua mamma gli disse: – Gilberto, vammi a prendere un secchio d’acqua alla fontana.
Subito, mamma – disse Gilberto. Ma intanto pensava: – Voglio dimostrare alla mamma quanto le voglio bene. Invece che nel secchio, l’acqua gliela porterò nelle orecchie.Fue a la fuente, metió la cabeza debajo de ella y se llenó la oreja con agua. Había tanto como un dedal y para llevárselo a casa el buen Gilberto tuvo que mantener la cabeza torcida.
Arriva quest’acqua? – brontolò la mamma che ne aveva bisogno per fare il bucato.
Subito, mamma – rispose Gilberto, tutto affannato.Pero para responder, ladeó la cabeza y el agua le brotó de la oreja y le bajó por el cuello.
Corrió a la fuente para llenarse el otro oído: había exactamente tanta agua como en el primero y bueno
Gilberto tuvo que mantener la cabeza torcida hacia el otro lado y antes de llegar a casa el agua se había derramado toda.
Arriva quest’acqua? – domandò la mamma stizzita.Quizá mis orejas son demasiado pequeñas, pensó entristecido el buen Gilberto. Mientras tanto, sin embargo, su madre había perdido la paciencia, creía que Gilberto había estado jugando en la fuente y le dio dos
Gianni Rodari
golpe, uno en cada oído.
Pobre bueno Gilberto.
Tomó las dos palmadas en paz y decidió que otra vez llevaría el agua con el balde.
Buonanotte e sogni d’oro da Francesca Ruberto ♥
